14 de enero de 2010

ENCUENTRO CON LA MUSICA Y CHOCOLATE ARMENTEROS.

Desde muy pequeño me gusto la música era como un alimento, a medida que crecí, ya adolecente tuve la fortuna de vivir en el barrio Nariño de mi Montería querida sector influenciado por verdaderos exponentes de la música monteriana, como que vivía Simón Mendoza director de la internacional y muy recordada sonora cordobesa, era nuestro vecino el saxofonista y clarinetista walberto Garcés.

Yo no me perdía de un entrenamiento de la sonora, en pantaloneta y sin camisa nos parábamos en la ventana de la casa de don Simón Mendoza en la calle 40 con carrea 4 y 5 me acompañaban mis amigos de la infancia tiberio Romero, Carmelo Ruiz, Jaime Cabrales el Neri Hernández, Pedro Hernández y toda esa recocha que luego de escuchar la voz del indio Chávez practicando la” camisola” y “pura paja” por la noche nos veíamos en la esquina del teatro Nariño para tomar el sabroso chicheme de los caballero y luego hacer una que otra pelea callejera a puño limpio con los del barrio colon, el barrio mas peleonero de montería.
Siempre la muchachada de Nariño estuvo influenciada por algo que después en música se llamaría salsa, Nicolás Meléndez y los hermanos Meléndez los del taller al día de montería moderno, fueron precursores .En la voz de Nicolás escuche por primera vez “perfume de rosa” y “quítate de la vía perico” de cortijo e Ismael rivera, así fuimos conociendo este genero musical y pasaron a ser nuestros ídolos Daniel santos, celio González, Nelson pinedo.
Nuestra fiebre llego al éxtasis cuando comenzamos a visitar el palmar, el amanecedero mas famoso y recordado por los monterianos, donde vivimos el despegue de esa revolución llamada salsa con Richi Ray y Bobi Cruz, palante y pa’ tras con, joseito mateo y el inolvidable 1920 de Johnny Ventura, conocimos la plena de Mon Rivera, el son de Celina y Reutilio y la bomba de Ismael Rivera.
Algún día escribo con mas detalles sobre el Palmar y el recordado cabaret” Cocodrilo bar” cuyo propietario fue mi querido padre Pedro Díaz Castilla.
Tres amigos me señalaron el camino de la buena música, Jairo Sánchez, el Ñato Hernández, y Eugenio Pineda, Cachao, willi colon, Héctor lavoe, pacheco, Roberto Torres, Perico Ortiz, Monguito el único, Papaíto, la Sonora Ponceña y mi gran ídolo Chocolate Armenteros, pasaron a nutrir mis conocimientos en la música afro cubana.
“El club familiar de la Vieja Luz” se convirtió en el templo de la música salsa en montería quien venia a montería y no visitaba la vieja luz, comía su delicioso pollo y bailaba “papa montero” y “pato robao” no había venido a Montería.
Nunca pensé que en este agite de la música en mi propia tierra conociera a uno de los grandes, el mejor trompetista de salsa el mismo que con su solo y picadito musical nos hacia danzar al ritmo de “hasta Pantoja baila mi son” “ Alfredo chocolate armenteros”.

Me encontraba en mi casa cuan do recibí una llamada era Eu pineda, me dijo te tengo una sorpresa te espero donde la vieja luz era un día cualquiera yo le dije “ ya salgo para allá”, cuando llegue vi en uno de los kioscos de palma sentadodos en unas mecedoras monposinas a dos morenos, uno era maik Mosquera y el otro no lo conocía cuando me acerco ala mesa ,Eu pineda me dijo” te presento un amigo”, se refería a chocolate, chocolate me dijo “ mucho gusto Alfredo armenteros” Yo me sorprendí y dije “ no puede ser” mire al hombre y efectivamente era la leyenda viviente de la salsa el mismo que acompaño con su trompeta a ,los grandes de la música caribeña, bestia pantalón blanco y camisa de seda con motivos caribeños , nos abrazamos y pedimos tres esquinas para celebrar el gran encuentro, pero faltaba el anfitrión del sitio, “El ñato” el hijo de la vieja luz el que se disputaba con Jairo Sánchez cual de los dos tenia mas acetatatos de salsa.
Hicimos una pausa y salimos para la casa del ñato Eduardo Hernández en el barrio los laureles a darle la sorpresa, tocamos la puerta el nos abrió y se quedo mirando al moreno y enseguida brinco y le dijo “chocolate” no puede ser nos mando a entrar, brindamos con águila comenzó aponer música de chocolate con el sexteto habanero, fue la locura, llamo a su hermano otro salsero, el profesor Alberto Hernández y retornamos donde la vieja luz en la charla le pregunte a chocolate ¿Cómo llegaste a montería,? me contesto, me vine de Cartagena del festival del Caribe detrás de una morena del barrio de la Granja” todos sonreímos volvió a responder “es que las mujeres de aquí tienen el mismo sabor que la cubana incluso estas tienen mas pimienta y sal”.
La rumba duro dos días, la trompeta de chocolate sonó en montería el la trajo consigo, porque nos dijo que era su compañera inseparable.
Creo que de las buenas cosas que nos han pasado en la vida fue haber conocido en persona a “ Alfredo chocolate armenteros”.



Hasta la proxima




No hay comentarios:

Publicar un comentario

Este es un espacio para la socialización de opiniones.
Este espacio de comentarios busca crear un debate constructivo y reflexivo, pero no pretende ser generador de ataques al pensamiento contrario.

LO + LEÍDO